¿Quién mató a Bambi?, de Santi Amodeo (Astronautas, Cabeza de Perro) es una alocada y divertida comedia, con un guión que posee un endiablado ritmo narrativo, pues hay una sucesión de gags cada vez mas cómicos. Parece, a veces fácil, hacer reír y conseguir la complicidad del público, pero no lo es. No obstante, esta película lo consigue, y de qué modo.
La trama es la siguiente: Al padre de la novia de Quim Gutiérrez no le cae bien su futuro yerno por ser un mantenido. Le da una bajada de azúcar y llama a su mejor amigo llamado «mudo», que es Julián Villagrán, que trabaja en la empresa para ayudarle. Este personaje es un desgraciado que vive con Quim, le deja a su novia y le consigue un trabajo donde no hacen nada. En la misma empresa trabaja un conserje cuyo hijo tiene una pizzería (Ernesto Alterio) con un socio italiano y una camarera (Clara Lago), buena amiga de la novia de Quim (Úrsula Corbero).
El negocio está a punto de cerrar y deciden secuestrar al padre de la novia, pero se equivocan y cogen al padre de Ernesto, porque cuando el padre está inconsciente, el otro le roba el traje y el coche y es hay cuando lo secuestra. En este periplo de secuestro aparece en escena un taxista bizco, en un curioso cameo de Andrés Iniesta, además de un abogado drogado y camello e incluso, Carmina (la madre de Paco León).
Así pues, ésta es una disparatada comedia, que no es más que una película de perdedores y sus rocambolescas circunstancias y peripecias. Gracias a un reparto inspirado con ganas de pasarlo bien y de hacer pasar un buen rato al espectador y a su guión milimétrico, es una de las propuestas más gamberras, divertidas y estimulantes del cine español actual. No os la perdáis.
JR PALOMAR.-