En un verano atípico como el que más, en el que los estrenos grandes brillan por su ausencia, se agradece que aparezcan películas que, en otro momento, acabarían condenadas al VOD. En verano es habitual que se cuelen en las carteleras algún estreno de terror y éste no es para menos. Por eso vengo a hablar de Madre Oscura recién estrenada en nuestras salas (las que hay abiertas a día de hoy, claro).
Madre oscura es una película solvente dentro del género de brujería. No entusiasma, pero tampoco es decepcionante. Su historia gira alrededor de la leyenda de una bruja que vive en el bosque y se dedica a raptar y comer a niños, haciendo que los adultos los olviden al momento. Así nadie nota nada de lo ocurrido. Un adolescente viene a pasar el verano a casa de su padre y su nueva pareja y, enseguida, empieza a observar extraños comportamientos en sus vecinos que le alertan de que algo se esconde en el bosque que les amenaza. Desde el inicio, hay detalles que a uno le resultan extraños y que pasarían desapercibidos de no ser porque, luego, todo encaja dentro del puzzle y, es esa intención de encaje, lo que hace que la película no engañe a nadie y dé una consistencia que se agradece. La película va dirigida a un público general, no muy exigente, y puede decepcionar a quien busque sustos constantes estilo Annabelle (empieza a ser preocupante que haya un público joven que va a ver estas películas esperando a que cada 10 minutos haya un susto o si no, su atención merma y directamente empiezan a hablar y a molestar en la sala). Aún así la película tiene sus momentos sangrientos (pocos pero correctos) y sobrenaturales. Y ese miedo a que cualquiera puede ser el enemigo y desconfiar de todos.
El giro final es interesante y da sentido a todo el relato sin sacarse ningún conejo de la chistera en pos de darle verosimilitud a la historia. Allí creo que radica lo mejor de la película. Repito: no esperar la atmósfera de “La bruja”, ni sustos constantes al estilo Warren, ni un final que te deje patidifuso. Es un buen producto para pasar una tarde en el cine, no hay florituras pero está bien rodada y al menos uno no siente que ha tirado el dinero.
Jose Isaac Pellicer.-
Tiene pinta de ser muy entretenida. Gracias por la recomendación 🙂