Menú
EL DILEMA QUE NO FUE
febrero 10, 2016 Articulos

AALEC

La verdad duele está basada en hechos reales, todo empieza en el año 2001 cuando el doctor Bennet Omalu (Will Smith), un médico forense nigeriano que trabaja en Pittsburgh (Estados Unidos), tras la muerte y posterior autopsia que realiza a un mítico jugador ya retirado de fútbol americano, Mike Webster (David Morse) se da cuenta que, en vez de ser una muerte accidental y ser una muerte por daño cerebral a consecuencia del fútbol americano por los golpes sufridos en el deporte, es la enfermedad de Encefalopatia Traumática Cronica, que le provocaba que su vida fuera un infierno.

Con la ayuda de su jefe en el departamento forense, el Doctor Cyril Wecht (Albert Brooks) que le apoya en todas sus decisiones a expensas de las consecuencias que pueda ocurrir, el doctor Julian Bailes (Alec Baldwin), antiguo doctor de Mike Webster en los Pittsburgh Steelers, empezarán a investigar si existen más casos de jugadores con esa patología.

Ésta es la segunda película de Peter Landesman, en la que tiene entre manos la típica historia de lucha y denuncia de personaje que lleva la razón y está enfrentado a a poderosos intereses en la sociedad, vuelve a ser la eterna lucha de David contra Goliat, en la que según explica uno de los personajes en la sociedad americana las dos cosas importantes son Dios y el futbol.

Con El Dilema, como referente en su horizonte, este film no llega ni a los logros visuales de Michael Mann y, aunque comienza manejando bien la narración con un arranque prometedor, conforme avanza la trama y hacia el final se alarga y reitera demasiado.

Will Smith, después de unas últimas películas que no funcionaron como se esperaba, tales como como After Earth y Focus, se ha buscado un papel hecho a la «medida del Oscar», con ciertos matices. Quisiera repetir lo que logró en Alí, pero esta vez no lo consigue. Aunque es cierto llega a encarnar con corrección a un personaje sosegado y honesto, bien secundado por su reparto. En definitiva, una historia y un personaje con potencial, pero que no acaban de ser redondo, aunque tiene sus alicientes. Nos preguntamos qué hubiera sido de ella en manos de un director con más gancho y personalidad.

JR PALOMAR.-

Deja un comentario
*