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Durante de la tormenta, de Oriol Paulo, es una película que parte de una premisa fantástica que bien podría remitirnos directamente a Regreso al futuro o a Frequency. Nico, de 12 años, muere en un accidente tras presenciar un asesinato en casa de sus vecinos la noche de una gran tormenta en 1989, en un bucle temporal y en la misma casa se encontrará con Vera, una enfermera que vive felizmente con su marido e hija pequeña en la misma casa que Nico en la época actual durante otra tormenta increíble. Ambas vidas se verán afectadas por el bucle y por las condiciones meteorológicas.
A caballo entre el drama, el thriller y el fantástico la película da uno y mil giros de guión y lo que prometía mucho se queda en agua de borrajas, alargándose hasta la extenuación y volviéndose tan y tan inverosímil que ni la esforzada interpretación de una excelente Adriana Ugarte (que es lo mejor de la película) consigue salvarla. En papeles importantes, Chino Darín (que interpreta a un inspector de policía del cuál no conviene saber mucho, pero que se antoja como un error de casting, y no decimos la causa) y Javier Gutiérrez (que da vida al vecino «presunto asesino» de Nico), así mismo el reparto se completa con Miquel Fernández, Álvaro Morte, Nora Navas y Clara Segura.
Aunque poseer un cast tan interesante no quiere decir que el producto resultante vaya a estar a la altura. En este caso, aunque todos cumplen, la película tiene tantos agujeros de guión y es tan rocambolesca, e incluso previsible finalmente para el espectador que vaya siguiendo con atención la trama, que no podemos sino pensar que es una gran oportunidad perdida del director de El cuerpo y Contratiempo. Lamentablemente, se queda en una ocasión perdida para conseguir un producto de género eficaz y eficiente, ya que se pierde en subtramas románticas y criminales, a cuál más inverosímil.
SONIA BARROSO.-
