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CRUELLA: ¿MALA SE NACE O SE HACE?
mayo 26, 2021 Articulos

Cruella es la nueva precuela en real action con la que Disney aterrizará en nuestras pantallas este mes de mayo tanto en las salas de cine como a través de Disney +. Dirigida por Craig Gillespie esta comedia con tintes de drama o drama con tintes de comedia nos presenta el pasado de una de las malvadas por excelencia de todos los tiempos: Cruella de Vil. Y lo hace siguiendo la moda que en los últimos tiempos inunda este tipo de cintas, humanizando al malvado y dándonos las claves del porqué de su comportamiento en la edad adulta. Por supuesto una infancia complicada y la inadaptación al entorno son claves ya más que usadas y que en esta película no faltan, al igual que no echaremos de menos la dualidad entre el bien y el mal dentro de nuestra protagonista, si bien es cierto que esta dualidad está enfocada desde el punto de vista de la educación y del hogar en contraposición a la propia naturaleza humana con la que cada uno nace y por supuesto de la inevitable carga genética.

¿Qué es lo que Cruella lleva dentro como ser humano y qué es lo que ha adquirido de su entorno cercano? La lucha interna de “lo que soy”, “lo que debería ser” y “lo que se espera de mi” es una constante durante prácticamente todo el metraje.

La adorable Emma Stone proporciona a esta nueva Cruella todos los matices necesarios para que veamos a una perfecta Dr Jekyll y Mr Hyde cargada de glamour, maldad, genialidad e inocencia al mismo tiempo. Su personaje va transformándose estética y psicológicamente a lo largo de la película de una forma tan natural que consigue que el espectador se crea a la perfección los motivos de esta metamorfosis y que además quiera que lleve a cabo su venganza. Porque Cruella es una historia de venganza. Y por supuesto para que deseemos con ardua necesidad que Estella, nombre real de Cruella, pueda culminar su venganza necesitamos a una antagomista a la altura y esta no es ni más ni menos que La Baronesa, interpretada por Emma Thompson,  una exitosa diseñadora de moda, prepotente, insultante, altiva, desdeñosa y cualquier otro tipo de calificativo que le daríamos a cualquiera de las malvadas de Disney, porque no nos equivoquemos, Cruella no es la malvada de esta cinta. 

A lo largo del metraje se ha conseguido conectar y justificar todas aquellas incógnitas de porqué Cruella es cómo es, se le ha dado sentido a los personajes de las películas anteriores y por supuesto conoceremos esa extraña relación de la De Vil con los dálmatas o el porqué de su nombre y su apellido.

En cuanto a la realización de la película se ha contado con todos los recursos que se pueden imaginar, desde planos secuencia que parecen infinitos hasta planos cámara en mano donde se potencia el estado anímico de la protagonista en ese momento. Un montaje que sin ser reseñable permite que la película sea fácil de ver sin que exista nada que nos descuadre o nos saque de escena.

De Cruella se esperaba un ambiente oscuro y lúgubre, no es así en absoluto. Nos traslada a un Londres gris en los años 70, eso es cierto, pero nos enseña la típica imagen que todos nosotros tenemos de la Inglaterra de cielos nublados. Si es cierto que no vamos a encontrar esa fotografía llena de color tan representativa de Disney pero la historia pide otra cosa y es lo que nos da. 

Dependiendo del momento narrativo del film tendremos colores más neutros, colores ocres, pastel, oros y por supuesto esos blanco, negro y rojo que son la marca de la protagonista. Y además estos colores van completamente unidos al concepto moda, no debemos olvidar que Cruella se dedica a la moda y en esto la cinta es puro espectáculo. Una maravilla para todo aquel que siga las tendencias y que adore la historia del diseño. La historia de la moda desde la década de los sesenta hasta la actualidad. Y de forma magistral. ¿Cómo es posible que si está ambientada en la década de los sesenta pueda representarse la moda actual sin que resulte anacrónico? Es fácil, es Cruella la que lleva las pasarelas a su indumentaria, esos vestidos de volantes imposibles combinados con cazadoras transgresoras…pero ella es Cruella y alguien que ha nacido con el cabello de dos colores puede permitírselo todo y además con estilo. 

El maquillaje de la película merece otra mención especial ya que estoy convencida que creará tendencia. Ojos marcados, enmarcados en negros, azules, con la línea del agua en blanco y ese russian red en los labios que no deja indiferente a nadie. Maravilloso.

La banda sonora. Cualquier amante de la música la calificaría de brutal. Ni un solo tema tiene el más mínimo pero. Son todo grandes exítos, pero no solo por el número de copias que vendieron en su momento si no por la calidad que tienen y por sus autores o intérpretes. Como un ejemplo de entre todos lo que se podrían poner está el Whole lotta love, de Led Zeppelin interpretado por Tina Turner, ahí es nada. Desde el pop de la época pasando por el rock, mucho rock y hasta su toque de punk, una banda sonora para los amantes de la buena música y que al igual que la estética en el vestuario  nos presenta las tendencias de la época, incluida la aparición del glam, la estética musical de la cinta es impecable. Una banda sonora de 10  donde cada pieza es un recurso más en la narración. 

Cruella es otro ejemplo más de cómo Disney se desliga sutílmente del cine exclusivamente para niños enfocándose en las generaciones más adultas que además podrán conectar todos guiños a las películas anteriores que esta cinta nos ofrece.

VANESA LORENZO VIVAS.-

 

 

"1" Comment
  1. A mi me resultó más entretenida de lo a priori esperado, si bien se me hizo larga, especialmente tras que se revele cierto detalle sobre el pasado VERDADERO de la protagonista: a partir de ahi ya no mantiene el mismo nivel que en su inicio.

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