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Zodiac, de David Fincher, es el «La madre del cordero« de los thrillers contemporáneos que ha influido claramente en thrillers posteriores como Adiós, pequeña, adiós, de Ben Affleck y Prisioneros, de Daniel Villeneuve. La he visto cuatro veces y siempre acompañado de mi mujer y co-fundadora de Facesonthebox, la primera en el cine y las tres restantes en casa en DVD.
Los protagonistas tres seres tan antagónicos como: Un policía incansable, David Toschi (Mark Ruffalo), un honesto dibujante, Robert Graysmith (Jake Gyllenhaal) y un periodista de vuelta de todo, Paul Avery (Robert Downey Jr).
Zodiac no está simplemente «basada» en los infames «asesinatos del Zodíaco» de California de la segunda mitad del siglo pasado, pues la película parece exudar toda la provocación del caso. El asesino, que nunca fue capturado, suministra generosamente tantas pistas, que Sherlock Holmes podría haber resuelto el caso en su sala de estar. Pero sólo un dibujante de un periódico era lo suficientemente terco para seguir la pista de un hombre que fue tal vez culpable.
Debido a que Graysmith es un desarmado civil, llegamos a estar ser realmente preocupados por su ingenuidad y los riesgos que toma, sobre todo durante una viasita a un sótano que es, a su manera, una de las mejores escenas que he visto en la gran pantalla a lo largo de estos últimos tiempos.
La película es una mezcla de caso policial con una de intriga periodística, pero libre de la mayoría de los clichés de cualquiera de esos subgéneros. Su logro más impresionante es reunir en un laberinto desconcertante los hechos y las sospechas sobre un período de años, y hacer el viaje a través de este laberinto de espanto y de suspense.
Uno puede imaginar estar irremediablemente sumido en los detalles de la investigación del Zodíaco, pero el director David Fincher (Seven, El Club de la lucha, La red social) y su escritor, James Vanderbilt, encuentran su camino con claridad a través de un viaje por la oscuridad. En una película con tantos personajes, el casting de Laray Mayfield también es crucial, como el único testigo en el caso, nos parece hacer recordar una cara cada vez que vemos una.
Lo que hace de Zodiac una película auténtica es la forma en que evita persecuciones, tiroteos, grandilocuencia y falsos clímax, y se limita a seguir el progreso metódico del trabajo policial y de la investigación periodístico-obsesiva.
DAVID PALOMAR RUBIO.-
